“Lo que San Martín expuso en esta ineludible reunión surge muy claro de sus propias expresiones a lo largo de su vida. Para lograr el alto ideal del bien común para los americanos, creía indispensable su independencia, por lo que venía a ofrecer sus servicios como militar al gobierno de su país nativo. Así lo dijo a los siete años de su llegada a Buenos Aires, cuando elevó su renuncia como general en jefe del Ejército de los Andes al director supremo, el 31 de julio de 1.819; ‘Hallábame al servicio de España el año de 1.811, con el empleo de comandante de escuadrón del Regimiento de Caballeria de Borbón, cuando tuve las primeras noticias del movimiento general de ambas Américas; y que su objeto primitivo era su emancipación del gobierno tiránico de la Península. Desde ese momento me decidí a emplear mis cortos servicios a cualquiera de los puntos que se hallaban insurreccionados: preferí venirme a mi país nativo, en el que me he empleado en cuanto ha estado a mis alcances: mi Patria ha recompensado mis cortos servicios colmándome de honores que no merezco…’“.
Fuentes: a) Texto: PICCINALI, Juan, “La vuelta de San Martín”, Instituto Nacional Sanmartiniano, enlace Web: http://www.sanmartiniano.gov.ar/documentos/documento012.php, consultado el 16/8/2015; b) Imagen: Documento fotográfico, inventario 159 del Archivo General de la Nación.